Mucho antes de que Enrique retratara con sus dibujos toda la acampada de la Puerta del Sol, vivió en Londres y trabajó en agencias de publicidad.  Ahí la muestra de que no para, sobre todo de dibujar. Siempre lleva un cuaderno, siempre observa y siempre escribe.
Intenta dibujarlo todo. Se reapropia de la ciudad y hace grupos de gente para dibujar en la calle, en el campo, en las montañas o incluso en las canchas de baloncesto.

Ilustra para La Cuarta Página de el diario El País y también ilustra la vida, la que ve y escucha y como él la ve y la entiende. Siempre crítico con todo, hace de sus cuadernos un diario muy interesante de reflexión. También viaja, observa y cuenta, de manera diferente pero, sigue a su manera. Estudió Bellas Artes y Diseño Gráfico. Ha ilustrado muchísimos libros durante 30 años.